Soy uno de esos pocos afortunados que puede decir que su circulo de amigos más cercano está plagado de mentes privilegiadas. Por un lado porque me he asegurado de que ese circulo no sea demasiado extenso, con lo que la dificultad de conseguirlo se reduce. Y por el otro, porque he sido, inconscientemente selectivo en ese aspecto.
Seguramente porque la empatía es un signo inequivoco de inteligencia, aunque no todos los seres inteligentes son empáticos, por ejemplo los psicopatas. Si que es cierto, que no conozco a nadie que lo sea y que no pueda considerar su inteligencia por encima de la media.
La inteligencia, es un concepto demasiado complejo como para dejarselo a los psicologos. No está relacionada con la capacidad de cálculo, ni con la potencia matemática únicamente, para mi, la mente invierte su potencial en aquello en lo que encuentra motivacion.
Algunos lo hacen en la música, en la pintura, en la literatura, arquitectura...otros con posibilidades menos bohemias lo hacen en sus trabajos diarios. Optimizando sus labores denotando un signo inequivoco de inteligencia, o consiguiendo salvar barreras que requiere un elaborado pensamiento. El cerebro decide como expresar su potencial. Y es este potencial abstracto, que se plasma en aquellas cosas concretas de la vida lo que para mi es la inteligencia.
Un albañil que lleva desde los 14 años poniendo ladrillos de sol a sol, y un catedrático de quimica son potencialmente, a mi modo de ver, igualmente inteligentes. Es la motivacion, los factores sociales, los culturales y el mismo devenir de la vida el que dictamina la funcion social de cada uno, aunque sus mentes sean potencialmente igual de capaces.
Existe la equivocada idea de pensar que los test de inteligencia son una muestra directa del potencial de la mente de una persona. En realidad, creo que son mas bien una poderacion cultural de nuestros conocimientos y no de la potencia de nuestra inteligencia.
En mi vida, por motivos que ahora no vienen al caso, he hecho un gran número de este tipo de pruebas, y los resultados siempre han sido tan dispares, que es imposible concluir a ciencia cierta cual es el nivel de mi intelecto. Y de la misma forma para mi, ¿Porque no para los demás?
Es un sistema imperfecto, inventado por el propio cerebro para conocer la potencia de si mismo.
Podemos medir la potencia del corazon, en su concepto mecánico, o la capacidad del estomago en termino de elasticidad, volumen, o incluso nivel de acidez. Hasta podemos medir la resolución aproximada de nuestro ojo al captar una imagen. Pero no conocemos un método empírico fiable para conocer el poder del cerebro.
Principalmente porque su majestuosidad se basa en que su potencia es relativa al campo al que se le aplica.
¿Quien es más inteligente, Bethoveen, o Shakespeare? ¿Einstein o Korolev? Los aspectos en los que se aplica sus capacidades son tan grandes y las partes de este organo tan diferenciadas, que tener una gran capacidad para la geometria no te garantiza ser un portento en el calculo, ni ser un génio de la pintura te proporciona una gran capacidad para tocar el violín.
No obstante la gente se obceca en sobreponer el valor del talento al de la paciencia. Una mente paciente y perseverante es igual de valiosa que una iteligencia llena de talento.
Siempre he pensando que la perseverancia es la cura para la falta de talento, y el talento era la habilidad innata para efectuar una tarea sin ser consciente de la dificultad que atañe. Ambas son diferentes formas de la inteligencia, que están igualmente entrelazadas con la personalidad y el entorno que nos rodea.
¿Cuantos genios de la física, música, pintura, literatura, arquitectura, quimica, medicina, ingenieria.... se han perdido en la pobreza, en los trabajos mediocres, en la vida monotona de un trabajo que consume hasta al mas valiente?
Un genio no solo ha de serlo, tambien ha de demostrarlo más allá de toda duda razonable para asi ser reconocido, y con el reconocimiento obtener unos recursos que le permitan dedicarse a sus intereses sin distracciones mundanas.
Pero sin distracciones mundanas no habría pan, ni agua, ni ladrillos, ni seguridad en las calles...ni quien realizara esas labores que parecen más simples pero no por ello importantes. El mismo sistema que consume genios, tambien los mantiene. Es su injusta imperfección y los prejuicios sociales lo que genera la aniquilacion de cien genios para mantener a uno.
El reparto de la riqueza, o más bien la falta del mismo, hace que miles de mentes se marchiten cada día en conflictos armados causados por los intereses de los ricos a miles de kilometros de alli.
Y pasaria lo mismo si los pobres fueran los ricos, y los ricos fueran los pobres, pues es algo que está dentro de la naturaleza misma del ser humano...pero eso, es otra historia.
Seguramente porque la empatía es un signo inequivoco de inteligencia, aunque no todos los seres inteligentes son empáticos, por ejemplo los psicopatas. Si que es cierto, que no conozco a nadie que lo sea y que no pueda considerar su inteligencia por encima de la media.
La inteligencia, es un concepto demasiado complejo como para dejarselo a los psicologos. No está relacionada con la capacidad de cálculo, ni con la potencia matemática únicamente, para mi, la mente invierte su potencial en aquello en lo que encuentra motivacion.
Algunos lo hacen en la música, en la pintura, en la literatura, arquitectura...otros con posibilidades menos bohemias lo hacen en sus trabajos diarios. Optimizando sus labores denotando un signo inequivoco de inteligencia, o consiguiendo salvar barreras que requiere un elaborado pensamiento. El cerebro decide como expresar su potencial. Y es este potencial abstracto, que se plasma en aquellas cosas concretas de la vida lo que para mi es la inteligencia.
Un albañil que lleva desde los 14 años poniendo ladrillos de sol a sol, y un catedrático de quimica son potencialmente, a mi modo de ver, igualmente inteligentes. Es la motivacion, los factores sociales, los culturales y el mismo devenir de la vida el que dictamina la funcion social de cada uno, aunque sus mentes sean potencialmente igual de capaces.
Existe la equivocada idea de pensar que los test de inteligencia son una muestra directa del potencial de la mente de una persona. En realidad, creo que son mas bien una poderacion cultural de nuestros conocimientos y no de la potencia de nuestra inteligencia.
En mi vida, por motivos que ahora no vienen al caso, he hecho un gran número de este tipo de pruebas, y los resultados siempre han sido tan dispares, que es imposible concluir a ciencia cierta cual es el nivel de mi intelecto. Y de la misma forma para mi, ¿Porque no para los demás?
Es un sistema imperfecto, inventado por el propio cerebro para conocer la potencia de si mismo.
Podemos medir la potencia del corazon, en su concepto mecánico, o la capacidad del estomago en termino de elasticidad, volumen, o incluso nivel de acidez. Hasta podemos medir la resolución aproximada de nuestro ojo al captar una imagen. Pero no conocemos un método empírico fiable para conocer el poder del cerebro.
Principalmente porque su majestuosidad se basa en que su potencia es relativa al campo al que se le aplica.
¿Quien es más inteligente, Bethoveen, o Shakespeare? ¿Einstein o Korolev? Los aspectos en los que se aplica sus capacidades son tan grandes y las partes de este organo tan diferenciadas, que tener una gran capacidad para la geometria no te garantiza ser un portento en el calculo, ni ser un génio de la pintura te proporciona una gran capacidad para tocar el violín.
No obstante la gente se obceca en sobreponer el valor del talento al de la paciencia. Una mente paciente y perseverante es igual de valiosa que una iteligencia llena de talento.
Siempre he pensando que la perseverancia es la cura para la falta de talento, y el talento era la habilidad innata para efectuar una tarea sin ser consciente de la dificultad que atañe. Ambas son diferentes formas de la inteligencia, que están igualmente entrelazadas con la personalidad y el entorno que nos rodea.
¿Cuantos genios de la física, música, pintura, literatura, arquitectura, quimica, medicina, ingenieria.... se han perdido en la pobreza, en los trabajos mediocres, en la vida monotona de un trabajo que consume hasta al mas valiente?
Un genio no solo ha de serlo, tambien ha de demostrarlo más allá de toda duda razonable para asi ser reconocido, y con el reconocimiento obtener unos recursos que le permitan dedicarse a sus intereses sin distracciones mundanas.
Pero sin distracciones mundanas no habría pan, ni agua, ni ladrillos, ni seguridad en las calles...ni quien realizara esas labores que parecen más simples pero no por ello importantes. El mismo sistema que consume genios, tambien los mantiene. Es su injusta imperfección y los prejuicios sociales lo que genera la aniquilacion de cien genios para mantener a uno.
El reparto de la riqueza, o más bien la falta del mismo, hace que miles de mentes se marchiten cada día en conflictos armados causados por los intereses de los ricos a miles de kilometros de alli.
Y pasaria lo mismo si los pobres fueran los ricos, y los ricos fueran los pobres, pues es algo que está dentro de la naturaleza misma del ser humano...pero eso, es otra historia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario